Señalan Reynaldo Dos Santos es un ejemplo perfecto de que las relaciones estrechas entre Vladimiro Montesinos y Keiko Fujimori todavía perduran, pese a que la candidata de Fuerza 2011 dice que no tiene ninguna relación con el exasesor de su padre Alberto Fujimori.
El brasileño Reynaldo Dos Santos, autodenominado el Profeta de América, vivió el año 1995 en Miraflores y se presentaba en esa época como el “Brujo de Vladimiro Montesinos” ante su clientela privada. El charlatán tenía un bloque esotérico en un programa femenino, pero fugó del Perú debido a una sentencia penal en su contra por amenazar de muerte con una pistola al administrador que le alquilaba un departamento.
En diálogo con LA PRIMERA, el administrador Rómulo Espinar Alvarado dijo que Dos Santos cobraba 50 dólares para realizar baños de florecimiento y lecturas de cartas a sus clientes, entre los que reconoció a connotados políticos del entorno del otrora dictador Alberto Fujimori.
Reynaldo Dos Santos vivió durante seis meses en un departamento del edificio residencial de la avenida Angamos 893, administrado por Rómulo Espinar, quien rápidamente presintió que el brujo brasileño le iba a traer problemas debido a su carácter afeminado y a la vez violento.
“Ese brujo se creía un Dios. Siempre me decía con unas maneras afeminadas y arrogantes que era el ‘Brujo de Vladimiro Montesinos’ y que por eso tenía mucha influencia. Cuando le dije que no podía usar el parqueo del edificio, porque estaba prohibido para inquilinos, amenazó con lanzarme una maldición”, contó Espinar.
No contento con eso, Reynaldo Dos Santos rompió la puerta de la cochera del edificio y amenazó con golpear a Rómulo Espinar, quien se vio obligado a denunciar el hecho en la comisaría del sector sin que la policía le hiciera caso. “El brujo tenía mucha influencia en la policía y tuve que acudir a la Fiscalía para que lo botaran del edificio”, dijo.
“Cuando se enteró que lo había denunciado ante la Fiscalía me buscó para apuntarme con la pistola que siempre cargaba en su cintura. ‘Yo sé dónde tú vives, pero tú no sabes dónde vivo. Si la denuncia continúa, te voy a matar como una rata, pedazo de m…A mí no me va a pasar nada porque soy el ‘Brujo de Vladimiro Montesinos’, me dijo con una mirada demoniaca”, señaló la víctima de Reynaldo Dos Santos.
Para velar por su seguridad, el administrador denunció el hecho en un programa de espectáculos, para desenmascarar a Reynaldo Dos Santos, quien seguía presentándose como un brujo bueno ante la teleaudiencia femenina de esa época.
Después de ello, la denuncia siguió su curso hasta que el 21 Juzgado Penal condenó a Reynaldo Dos Santos a dos años por violación de la libertad personal en agravio de Rómulo Espinar. El brasileño trató de escapar del país, pero fue detenido por la Policía de Requisitorias en la frontera con Ecuador.
Rómulo Espinar por fin sintió que se había hecho justicia, porque nunca más volvió a saber de Reynaldo Dos Santos hasta hace pocos días. “Yo pensé que con todo el escándalo ese desgraciado ya no iba a aparecer de nuevo en nuestro país. Ese sujeto es un delincuente y un estafador”, acotó indignado.
“Casi me muero del susto cuando lo vi de nuevo en la televisión y apoyando a Keiko Fujimori, la hija de Alberto Fujimori y ahijada de Vladimiro Montesinos. Si Reynaldo Dos Santos es vidente o profeta, entonces porque no adivinó que lo iban a detener por amenazarme de muerte”, refirió Rómulo Espinar.
Añadió que Reynaldo Dos Santos es un ejemplo perfecto de que las relaciones estrechas entre Vladimiro Montesinos y Keiko Fujimori todavía perduran, pese a que la candidata de Fuerza 2011 dice que no tiene ninguna relación con el ex asesor de su padre Alberto Fujimori. “Montesinos y Keiko siguen en contacto. ¿Entonces cómo se explica que el brujo de Montesinos ahora predice que Keiko Fujimori va a ganar las elecciones para favorecerla? La gente tiene que enterarse que estamos en peligro de que vuelva la mafia fujimontesinista al poder”, advirtió.
Rómulo Espinar agregó que piensa denunciar por difamación al autodenominado “Profeta de América”, porque declaró en un programa televisivo que el administrador era un impotente y un loco paranoico por denunciarlo. “Él dijo que yo era impotente en un programa de televisión. Ahora va a tener que responder por esa acusación”, subrayó.