"No hay casi ni tiempo. Estamos en la hora del despegue. Bueno, no me voy de la Patria, como decía María León. Me voy fortalecido por tantas manifestaciones de tanto amor y buena fe. Me conmovió esta mañana Dilma Rousseff con sus sentimientos y palabras. Me mandó decir Lula que si él tiene que convertirse en su niñera, se convertirá".
Así dijo el presidente Chávez al salir de Miraflores y ver la multitud que se había reunido para despedirlo.
"Les encomiendo mi casa, muchachos de la Guardia de Honor, trabajadores y trabajadoras de Miraflores. La Bandera está libre ahí, en el viento libre de Venezuela".
El presidente se refirió a nuestra historia: "Hemos recuperado la independencia nacional, de la patria. Es lo más grande después de tantos años de lucha y sacrificio. Dichosos los que estamos viviendo este tiempo y dichoso yo , gracias pueblo mío por darme tanto desde aquél 4 de febrero. Gracias al ejército, a la fuerza aérea, Marina, Milicias, hijo soy de esta Patria y de este ejército. Ahí fui formado. Dichoso yo de ser soldado de Bolívar y de ser hijo de este pueblo".
El presidente también reiteró: "Les juro que las próximas horas y días lucharé como ustedes me han enseñado a luchar, por mi vida que es la vida de ustedes, de la Patria. Defenderé palmo a palmo esta vida que les pertenece por la patria buena".
"Les encomiendo mucha conciencia, unidad ante las adversidades y dificultades. Unidad bajo la bandera patria y la bandera de Bolívar, delante de esta burguesía pitiyanqui y apátrida".
Ya para finalizar sus palabras, el presidente dijo: "Con cáncer o sin él, con lluvia o sin ella nadie impedirá la victoria del 7 de octubre. Estamos obligados a vivir, a vencer para garantizar la patria".
Voy a enfrentar una dificultad más. Bolívar lo dijo: soy hombre de dificultades. Yo lo digo con él".
El presidente entonces, luego de vivas a la revolución abordó el vehículo que lo llevará a Maiquetía para abordar su vuelo a La Habana.
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