El Congreso de la República decidió, por unanimidad, la
modificación del artículo 41 de la Constitución, que tendrá que ser refrendada
en una segunda votación en la siguiente legislatura. La medida no es
retroactiva.
En el 2001, por primera vez, se
intentó aprobar la imprescriptibilidad de los delitos de corrupción. Se
presentaron doce proyectos, todos se quedaron el camino. Dieciséis años más
tarde, por unanimidad, el pleno del Congreso ha empezado a corregir ese error.
Con la norma aprobada ayer por 111
votos a favor y ninguno en contra, se duplicará el plazo de prescripción de los
ilícitos cometidos contra la administración pública o el patrimonio del Estado,
tanto para los funcionarios o servidores públicos como para los particulares.