"Para algunos la patria se vende y para otros, la patria se defiende", fueron las primeras palabras de Ollanta Humala. "El país no puede seguir viviendo de la renta minera, hay que diversificar la economía porque los precios internacionales no pueden regir el futuro del país".
Por eso, Humala propone sacar provecho de la gran potencialidad del sector agrario facilitando el acceso al crédito para los pequeños productores, priorizando el consumo interno de su producción y capacitando más a los técnicos agrarios de mañana.
Recordó que Gana Perú en su plan de gobierno, ya había planteado la implementación de un modulo de desarrollo agrario para luchar contra el monopolio y el abuso que se practica por las grandes empresas que compran barato lo que venden caro.
Humala también apoya un desarrollo sostenible de la producción nacional y por eso rechazó firmemente la introducción de cultivos transgénicos en el país. Recordó que si los rendimientos de los transgénicos eran asombrosos en comparación con los cultivos orgánicos, su implementación implicaba entrar de nuevo en un círculo de dependencia a las multinacionales que obligan a los productores a comprar siempre a la misma empresa y, varias veces al año, esas semillas genéticamente modificadas.
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