Madre de Dios es la región de la Amazonía más perjudicada por el avance de la minería ilegal. Hasta el momento se calcula que la búsqueda del oro ha provocado la destrucción de más de 32 mil hectáreas de bosques y la contaminación del agua con mercurio. Sin embargo, ante esta amenaza latente surge una nueva posibilidad de combatirlo: la gente de Madre de Dios.
En los últimos años diversas organizaciones de pobladores, agricultores y conservacionistas vienen promoviendo el ecoturismo y la creación de Áreas de Conservación Privada, dos formas diferentes pero seguras de proteger el bosque y cuidar la biodiversidad. Estas son sus historias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario