El
Poder Judicial condenó al sacerdote Waldir Pérez Salias, capellán del colegio
privado San Alfonso de la Congregación de los Padres Redentoristas en Ate.
En un
contexto en el que miembros de la Iglesia Católica están siendo acusados de
abusos sexuales (caso Sodalicio), la Sala Penal Permanente de la Corte Suprema
de Justicia confirmó, en última y definitiva instancia, la condena de 35 años
de prisión al sacerdote Waldir Pérez Salias por haber cometido el delito de
violación sexual en agravio de un menor de edad.
Pérez
Salias aprovechó su condición de sacerdote y capellán del colegio privado San
Alfonso de la Congregación de los Padres Redentoristas, en el distrito de Ate,
para abusar sexualmente del menor identificado con la clave 132-2012. La violación
fue sistemática, el religioso la cometió en reiteradas oportunidades en las
instalaciones del colegio entre julio de 2010 –cuando el menor tenía 10 años de
edad– y abril de 2012.
El
menor tuvo que narrar lo que le hicieron. Fue entrevistado por las autoridades
en la Cámara Gesell y contó de manera coherente y con detalles la forma y las
circunstancias en las que el condenado abusó de él. Incluso contó que el
religioso le ofreció 150 nuevos soles luego de haberlo violado.
Las
pruebas condenaron al sacerdote. El tribunal tomó en cuenta el certificado
legal que probó "signos de acto contranatura antiguo" en el menor y
el resultado de pruebas psicológicas que determinaron la existencia de
"trastornos de las emociones de su desarrollo asociado a inadeacuada
dinámica familiar". También consideró la versión del condenado, quien
reconoció haber mantenido relaciones sexuales con la víctima y, en su defensa,
dijo que fue una propuesta del menor.
Además
de purgar 35 años de prisión, la Sala señaló que el sentenciado deberá pagar a
la víctima un monto de ocho mil nuevos soles por concepto de reparación civil.
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