“No tenemos agua, estamos yendo sin rumbo, los policías nos tienen atrapados en los buses”, así describió la dirigente indígena Tania Suárez en contacto con telefónico con Erbol desde el vehículo de transporte público que trasladaba a los marchistas con rumbo desconocido.
Entre sollozos y preocupada, ella, indicó que la situación se hizo insostenible, porque los policías que los vigilaban no les permitían ni siquiera salir para ir al baño.
Suárez, junto a aproximadamente 50 personas fueron obligados a subir la flota, tras la intervención a la marcha indígena dispuesta por el Gobierno, la tarde de este domingo.
“Nos han puesto boca abajo, nos han obligado a subir a los vehículos. No sabemos dónde nos van a llevar. Hay gente que está yendo en camioneta, no tiene abrigo, están descalzos”, indicó.
Doña Tania calificó de “brutal” la actitud asumida por el Gobierno tras la intervención policial.
Entre sollozos y preocupada, ella, indicó que la situación se hizo insostenible, porque los policías que los vigilaban no les permitían ni siquiera salir para ir al baño.
Suárez, junto a aproximadamente 50 personas fueron obligados a subir la flota, tras la intervención a la marcha indígena dispuesta por el Gobierno, la tarde de este domingo.
“Nos han puesto boca abajo, nos han obligado a subir a los vehículos. No sabemos dónde nos van a llevar. Hay gente que está yendo en camioneta, no tiene abrigo, están descalzos”, indicó.
Doña Tania calificó de “brutal” la actitud asumida por el Gobierno tras la intervención policial.
“De cinco a seis horas estamos metidos en este bus. Nos están llevando a Yucumo. De ahí no sabemos dónde nos van a llevar”, agregó.
La historia de Tania Suárez sintetiza el drama de la movilización indígena, tras la represión ordenada este domingo desde el Gobierno
Chaparina, 25 septiembre 2011 A.P./A.A./
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