El día de hoy al promediar las 8 de la noche llegó Telmo Hurtado al país, el teniente del ejército peruano culpable de la masacre de Accomarca, tras años de hallarse prófugo de la justicia. Conocido como “El carnicero de los Andes”, Hurtado es señalado como culpable de la masacre ocurrida el 14 de agosto de 1985 en la cual fueron asesinados 69 habitantes -entre mujeres, niños y ancianos- de aquella localidad.
Llegará tras un largo proceso de extradición desde los Estados Unidos, país donde se hallaba refugiado amparado en la ley de amnistía para los efectivos militares que combatieron en las zonas de emergencia. Hurtado deberá responder ante los tribunales peruanos por aquel crimen ocurrido 26 años atrás, en el cual elementos de la 2ª División de Infantería del Ejército se encargó de eliminar a cerca de 69 personas que la Inteligencia militar había identificado como Delincuentes Terroristas.
El precedente legal señala la culpabilidad del “Carnicero de los Andes”. En 1992, tras declararse culpable, el fuero militar lo sentenció a 6 años de prisión por el delito de negligencia. Sin embargo fue absuelto en los cargos de homicidio, y tras cumplir su condena, sorpresivamente Hurtado fue reincorporado a las fuerzas armadas.
Así lo señala el abogado Carlos Rivera del Instituto de Defensa Legal: “El hecho concreto es que desde el momento mismo que el caso fue denunciado a la opinión pública peruana el Ejército y el Estado peruano desplegaron un esfuerzo conjunto para ocultar el crimen y los perpetradores”.
Hoy al pisar suelo peruano aquel hombre señalado por la Comisión de la Verdad como perpetrador de uno de los más sangrientos crímenes ocurridos durante el conflicto armado interno deberá responder a la justicia. Frente a los tribunales, su testimonio dará luces sobre los crimenes y excesos cometidos en aquellos aciagos años.
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