lunes, 31 de octubre de 2011

Vicepresidenta Espinoza es acusada de presionar para envío de tomógrafo a Piura



Al escándalo protagonizado por el legislador Omar Chehade, se suma una nueva piedra en el zapato para el gobierno del presidente Ollanta Humala. La primera vicepresidenta Marisol Espinoza es acusada por autoridades y dirigentes sociales de Apurímac de supuestamente haber ejercido su poder para trasladar un tomógrafo, destinado a Abancay, a Piura, su ciudad natal.

Según informó el programa de TV “Cuarto Poder”, a fines del año pasado Essalud, a través de la Oficina de la Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (Unops), convocó a una licitación pública internacional para comprar ocho tomógrafos, que serían traslados a diferentes hospitales del país.

La lista oficial de los ocho centros médicos que serían beneficiados con estos equipos, detalló el dominical, no incluía a Piura.

La empresa que ganó esta licitación fue Cymed Medical SAC, pero a fines de abril último se firmó una adenda para la compra de un tomógrafo adicional, de marca Toshiba de 16 cortes y que vale 457 mil 933 dólares. Este aparato -que permite detectar tumores, coágulos peligrosos, malformaciones y problemas óseos- tenía como destino el Hospital II de Abancay.

Sin embargo, el tomógrafo nunca llegó a la capital de Apurímac, porque el 6 de setiembre el gerente general de Prestaciones de Essalud, Rino García Carbone, aprobó que el equipo médico fuera reasignado al hospital José Cayetano Heredia de Piura.

ACUSAN A ESPINOZA

Las autoridades y dirigentes sociales de Apurímac acusaron que detrás de esta decisión estaría la primera vicepresidenta y congresista por Piura, Marisol Espinoza.

Esta denuncia se basa en que el 11 de agosto, un mes antes de que se reasignará el equipo de Abancay a Piura, Espinoza le envió una carta al presidente ejecutivo de EsSalud, Álvaro Vidal, pidiéndole explicaciones de por qué un tomógrafo que requería Piura desde hace cuatro años, no había llegado todavía.

Coincidentemente, casi un mes después de su carta, el 6 de setiembre se hizo oficial el traslado del tomógrafo comprado para Abancay a la ciudad natal de la legisladora oficialista.

NEGÓ PRESIÓN POLÍTICA

Consultada sobre esta denuncia en su contra, Espinoza negó que haya ejercido presión política para que el equipo médico sea llevado a Piura. “Es una carta que haría cualquier congresista que está dentro de sus facultades y sus funciones constitucionales”, agregó.

La congresista admitió haberle enviado al titular de Essalud una carta en la que le pedía una explicación por la demora de la llegada del tomógrafo a su ciudad natal, pero descartó que esto constituya un delito.

“Nosotros no le hemos quitado a nadie un tomógrafo. Lo que hemos hecho y como le puedo demostrar desde el 2007, se ha hecho el requerimiento del tomógrafo y estos han sido los puestos aprobados: Áncash, Puno, Piura, Junín, Almenara y Rebagliati”, manifestó.

Para concluir, la parlamentaria atribuyó esta denuncia en su contra a militantes apristas que, según ella, pretenden dañar su imagen.

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