El presidente del Consejo de Ministros, Óscar Valdés, hizó una "cordial" y no una hipócrita o cachacienta invitación al presidente regional de Cajamarca, Gregorio Santos, a sumarse a la "mesa de diálogo" para escuchar sus dictados y sus órdenes y cumplirlos a pie juntillas.
Hace esta desesperada invitación el premier, porque esta bien seguro que los acuerdos suscritos hoy con los "representantes del pueblo de Cajamarca", es un penoso show que en absoluto no tiene ningún valor.
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